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Horror en el geriátrico

Horror en el geriátrico

Nuevamente fue clausurado un geriátrico en la ciudad de San Francisco por graves deficiencias. Familiares denunciaron agresiones y hechos aberrantes hacía los abuelos.

La municipalidad de San Francisco clausuró el geriátrico Nona Olga ubicado en calle  Salta al 1730 por orden de la Jueza de Faltas Municipal Dra. Roxana Chevallier, y los internos fueron derivados a sus familias y al Hogar de Ancianos provincial.

Luego de conocerse la clausura del mismo, familiares de los internos denunciaron graves y aberrantes hechos en perjurio de los abuelos allí internados, y habrían denunciado las graves irregularidades en la justicia local.

Además de la falta de habilitación para funcionar, una mujer que tuvo a su tía internada en el lugar, denunció que el dueño del geriátrico “maltrataba” habitualmente a los abuelos. “Mi tía que estaba internada ahí me contó que a su compañera, el dueño del lugar le saco el pañal sucio y se lo paso por la cara. Otra vez le tiró los pelos, y hasta cachetazos le supo dar este tipo” contó acongojada la mujer que por el momento prefirió mantener en reserva su nombre, pero sería una de las personas que iniciaría acciones legales a este establecimiento. Del mismo modo, explicó que su familiar solo estuvo internada un mes y medio en el geriátrico, dado que se enteró de los hechos de malos tratos y violencia que allí ocurrían. A raíz de estos hechos, ahora su tía ahora se encuentra alojada en su casa.

Para finalizar, la mujer expresó que quién sería el dueño del geriátrico la habría amenazado e insultado en un cruce ocasional que habrían tenido en la calle.

También se pudo saber que el personal municipal actuante encontró en el lugar a una anciana con síntomas de desnutrición y deshidratación, la cual fue trasladada a una clínica privada de la ciudad.

Lamentablemente la situación irregular de estos establecimientos, que se parecen más a una cárcel del siglo pasado que a un lugar para cuidar abuelos, se repite, y si la municipalidad sigue con esta metodología de control, no sería novedoso que en los próximos días se conozcan casos similares en otros geriátricos de la ciudad, donde los abuelos son sometidos diariamente a los más aberrantes castigos mientras pasan sus últimos días por este mundo. Casi siempre solos y olvidados también por sus familiares.

  

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