Industriales bajo la lupa
Recientemente venimos en estas páginas poniendo énfasis en el accionar de la Unidad de Investigación Financiera (UIF), organismo que depende directamente de la Presidencia de la Nación y que funciona en paralelo, independientemente, de la AFIP exclusivamente controlando los orígenes de los dineros de las empresas y ciudadanos en el país previendo mecanismos de lavado, o sea maniobras para esconder fondos provenientes de ilícitos tales como el narcotráfico, el tráfico de armas o las evasiones fiscales tributaria y cambiaria. En ese marco cronicamos semanas atrás sobre este organismo, la UIF, operando en las Mutuales de nuestra ciudad y del país. Paralelamente ciudadanos comunes, comerciantes y empresarios fueron requeridos por los bancos donde operan acerca del origen de los fondos que manejan en procura de darle justificación y claridad.
La industria es un sector de San Francisco que no se ha escapado a estas generales de la ley: un establecimiento fabril, modelo, exportador, de muchos años de trayectoria en el medio, levantó en los últimos meses sus nuevas instalaciones de casi cuatro mil metros cubiertos en el Parque Industrial y lleva casi un año sin usarlas, es decir vacías y manteniéndose en sus instalaciones actuales, en dos galpones separados sobre la Ruta 19 en la salida Este de la ciudad… La Unidad de Investigación Financiera le puso el ojo y habría confirmado que esas flamantes instalaciones, que son modelo, no estarían declaradas ante la AFIP. O sea que no tendría dicha empresa justificado impositivamente semejante inversión que le generó construir esa nueva sede. El trascendido es que estaría el titular de la Firma Industrial esperando vender las actuales instalaciones para así poder justificarse. Esto evidencia que hay manejos de fondos millonarios provenientes de la evasión, y que no solo sería tributaria, si no también cambiaria, por registrarse según trascendidos, una causa por evasión penal cambiaria en el año 2001 a raíz de exportaciones a Bolivia y la consecuente retención de esa Firma de los pertinentes aranceles.
Esta mecánica ha llevado a la UIF a rastrear otras empresas del Parque Industrial y que exportarían a Panamá pero vendiéndose a sí mismas logrando de ese modo evadir el 35% de impuestos a las ganancias. Otra exportando con mecanismos similares a Dubái y mostrando aquí una fluctuación de compra y venta de bienes vertiginosa y poco explicable.
Finalmente debemos consignar que la UIF es ya una realidad a rajatablas en nuestra ciudad y en todo el país. Es nada más y nada menos que el gran contralor del Estado Nacional respecto a los manejos de fondos, una carencia que años atrás mostrábamos como Nación y era cuestionada en el contexto Internacional.
Pudimos confirmar que la Unidad de Investigación Financiera con sedes más cercanas en Córdoba y Santa Fe, abriría filiales en ciudades con más de cincuenta mil habitantes, San Francisco y Rafaela entre ellas y que no registra operativamente jurisdicción territorial