Aresca… Arisco

En las últimas semanas, apenas terminado el verano, el Intendente municipal Ignacio García Aresca enfrenta enojos en el interior del palacio.

En todos los pasillos de la municipalidad, los distintos funcionarios, se quejan de la falta de atención personalizada del jefe comunal a sus más estrechos colaboradores. 

Ocurre que ha descargado en el Secretario Político Piscitello esa responsabilidad y parece no alcanzar, no ser suficiente.

Lo mismo sucede con distintas instituciones y centros vecinales que no logran una reunión con el intendente a pesar de los masivos pedidos. La conducción de Aresca en estos primeros meses se muestra aislada y estructurada. Más cercano al funcionamiento de una empresa que a la de un gobierno municipal que representa a los vecinos.

Lograr una reunión con el jefe comunal es casi imposible. Esta situación de mensajes y mensajeros por ahora parece no funcionar y le trajo aparejado algunos cortocircuitos dentro del partido gobernante que ahora se comienzan a visibilizar.

El joven Oyero, designación reciente, es otro de los encargados de atender los pedidos e inquietudes, y luego trasladárselo al intendente. Con esta modalidad de no atender personalmente ni siquiera a algunos de sus funcionarios, comenzaron a surgir las quejas y algunas filtraciones que Aresca deberá frenar sino quiere enfrentar una interna dentro de su propio grupo de trabajo.

Quienes tienen que pasar por el “filtro” de sus secretarios predilectos ya comenzaron a mostrar los dientes y quieren un trato directo con el que ahora se cree “jefe”.

En estos momentos Aresca se encuentra en Buenos Aires junto a su círculo de gobierno más íntimo, el cual luce muy reducido. Nadie supo informar los motivos de este viaje a la capital del país.

Otro aspecto que causa ruido, son las diferentes designaciones de segunda línea que se están dando en el municipio. Especialmente en el área de prensa, en Emugas y en el propio corralón.