Bozal para policías
Prohíben a los policías manifestar publicamente que falta personal o materiales para trabajar. La orden fue dada por escrito y habría llegado a todas las jefaturas policiales de la provincia.
Por medio de un comunicado emitido por la jefatura Departamental Norte de la policía de Córdoba, se le habría informado a todas las unidades regionales que funcionan en su distrito (entre ellas de Unidad Regional VI con asiento en San Francisco), que ningún efectivo policial podrá exponer ante los medios de prensa, los vecinos o políticos, que no cuentan con los recursos necesarios para realizar su tarea.
Dicha misiva, que habría sido enviada a todos los jefes de las diferentes comisarías, con la intención de que ningún uniformado de la provincia pueda expresar o hacer público cualquier inconveniente que exista en la fuerza. Además expresa que quién rompa esta directiva será sancionado y pasado a situación pasiva.
En el párrafo anterior también se le solicita al personal policial, sin distinción de jerarquía, que escuchen a los reclamos de la ciudadanía. “No hay excusas que deban esperar un superior para tal fin” ordena el primer punto del memorándum enviado a las departamentales.
En el segundo punto, y el más polémico, expresa que “Ningún efectivo policial podrá expresar ante la sociedad (prensa, vecinos, políticos) que no se cuentan con recursos humanos y materiales que en cada caso particular sea requerido. El no cumplimiento de dicha directiva será pasible de la sanción administrativa correspondiente (situación pasiva)” explica la misiva.
En su encabezado, les solicita a todos los Oficiales Superiores, jefes y encargados de dependencia que deberán tomar conocimiento de la nueva normativa y tendrán que notificar por escrito a la totalidad del personal.
Esta nueva norma o imposición de los jefes máximos de la policía no habría caído para nada bien en muchos de los uniformados que conforman la fuerza, dado que uno de los recursos que tenían para ser escuchados eran los reclamos públicos. Si bien en muchos casos los policías preferían permanecer en el anonimato a la hora de brindar ciertas informaciones, esta nueva regla es una forma de decirles que: si descubrimos que hablas de lo que no debes te quedas sin trabajo.
Por el momento el arco político no se pronunció al respecto, y se espera que respuesta puede haber desde el ministerio de seguridad provincial, o la participación que pudo tener el mismo en esta orden impartida recientemente.
En la policía de Córdoba siguen las internas, y el pase de facturas a través de los medios fue moneda corriente en los últimos años. Esta medida apuntaría a frenar a estas cuestiones.
Lo cierto es que la libertad de expresión y conocer lo que realmente sucede en la fuerza policial debería ser un derecho como en cualquier dependencia de la administración pública. En definitiva, los vecinos tenemos la obligación de saber la realidad de la policía, sobre todo en épocas donde el tema de la inseguridad está en boca de todos.