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Construyendo la estafa

Construyendo la estafa

Clemar Botero se dedica a la venta de materiales de construcción, y con una quiebra en la espalda,  es quien formó parte de la bicicleta financiera que terminó en la gran estafa de Petrovila S.A. Botero fue quien intercambiaba cheques que tenía en su poder de cuentas a nombre de dos personas: de apellidos Laino y  Tolosa –serían dos testaferros- con la empresa antes mencionada. Los cheques que aportó a la mesa fueron denunciados en su totalidad, provocando la caída de los demás integrantes. Esta situación le permitió hacerse con jugosas ganancias.   

Actualmente Botero Tiene un corralón en el gran Córdoba y sus clientes son mayoritariamente pequeños municipios, pero la actividad principal sería la de abrir cuentas bancarias a nombre de insolventes, pagar con  esos cheques, y luego denunciar las mismas como extraviadas.  Solo en San Francisco, las chequeras, una a nombre de Laino y otra a nombre de Tolosa, tienen al menos un centenar de cheques denunciados.

Además, comercializó cheques de Petrovila S.A en Córdoba capital realizando grandes compras a nombre de su socio de apellido Villanueva. Clemar Botero es la punta de un ovillo de maniobras fraudulentas millonarias.

En ediciones anteriores habíamos anticipado que el caso de Petrovila tenía aristas que involucraban a muchas personas, las cuales fueron sacando dividendos suculentos mediante estas maniobras.

El 5 de diciembre pasado se realizó una exposición por extravío en la Departamental San Justo de una persona de apellido Moya de 22 años, quien aseguró que había “perdido” una cartera,  conteniendo en su interior 11 cheques de cuentas pertenecientes a al Sr. Laino y Zalazar. Dicha denuncia se encuentra en manos de este medio, y serviría para certificar la modalidad que utilizó Botero para estafar inclusive a la empresa Petrovila y desencadenar una andanada de cheques sin fondos que supera en total los 40 millones de pesos.

Por su parte, de Adrián Garetto, titular de Petrovila, está afrontando una difícil situación para llegar a cubrir algunos de sus cheques, asegurando de que fue timado por varias personas, y ahora debe afrontar una deuda que no le pertenece. La situación financiera de Petrovila está siendo administrado por un estudio contable de la Ciudad de Rafaela, en vista de solucionar el conflicto y determinar la verdadera deuda.

 

 

 

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