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Las pruebas que le dieron la libertad a Lovera: “Mi novia se pegó un tiro”

Las pruebas que le dieron la libertad a Lovera: “Mi novia se pegó un tiro”

EL TIEMPO tuvo acceso a diferentes pruebas y pericias que favorecieron al policía Lovera y que hicieron que el fiscal Alberione le otorgue la libertad el viernes último. Para la justicia la hipótesis es que se trató de accidente fatal o de una instigación al suicidio. “Mi novia se pegó un tiro” fue la frase que siempre utilizó el policía para referirse al hecho.

El viernes el fiscal de Delitos Complejos Bernardo Alberione decidió otorgarle la libertad al Policía santafesino Alejandro Lovera, acusado por la muerte de su pareja Yuliana Chevalier. A pesar de que por el momento el uniformado sigue imputado de Homicidio calificado, todo indica que a la brevedad existiría un cambio de caratula. Ante tanta información confusa, EL TIEMPO pudo acceder a algunas de las pruebas que fueron cambiando la visión del fatal hecho, y que hoy para la óptica judicial está más cerca de un accidente fatal  o de una instigación a suicidio, que de un homicidio.

Este es una cronología de cómo se habrían desencadenados los hechos de acuerdo a las precias y pruebas recolectadas:

-En el cuerpo de la mujer encontraron rastros de droga y alcohol mientras que en del policía no.

-En la mano de la mujer había restos de pólvora y no así en la de su pareja. Todo indica que ella fue quien apretó el gatillo del arma reglamentaria del uniformado.

- 4:20 de la madrugada el policía fotografió a Yuliana con el arma en la mano apuntándose al mismo lugar donde finalmente se disparó. Dicha foto se la envió a familiares de la mujer contándole lo que estaba pasando esa madrugada.

-El lugar donde cayó el arma es compatible con la foto tomada. Esto quiere decir que podría haber caído allí si se disparó en la posición que fue tomada la fotografía, como indican las pericias. Estiman que la escena del crimen no fue modificada porque al caer el arma “cachó” un cerámico y estaba en ese lugar.

-4:21 el Lovera se comunica con el 101 y pide una ambulancia, o sea que menos de un minuto después de la foto ocurrió el disparo. En las grabaciones se escuchan gemidos de la mujer herida. Los investigadores entienden que si se hubiese tratado de un homicidio, el llamado no hubiera sido inmediato, sino que el policía habría esperado que la mujer muera y luego pedido auxilio.

-4:23 reclama la ambulancia y la joven seguía viva.

-Minutos después llega la ambulancia y traslada a Yuliana al hospital Iturraspe donde muere a los pocos minutos de ingresar.

-La justicia entiende que la declaración del uniformado fue “mi novia se pegó un tiro” y que nunca hubo incongruencias, haciendo referencia a una cuestión accidental y no a un suicidio como trascendió en la prensa.

-En estos momentos se están realizando pericias en el arma, específicamente en el gatillo de la misma, para conocer la sensibilidad y que presión o fuerza se necesita para dispararla. Cabe aclarar que la pistola 9 mm. era la reglamentaria del policía y no poseen seguro. Muchas fuerzas policiales de otras provincias la sacaron por su peligrosidad.

-La justicia analiza un cambio de caratula y la investigación podría cambiar a una instigación a suicidio o un accidente fatal que sería un homicidio culposo.   

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